Cuidado de las plantas de interior y exterior:
En el caso de las plantas, tanto de interior y exterior, es importante colocarlas en los rincones más luminosos, pero cuidado con las que no soporten el sol directo.
Si la luz es escasa:
Mantener las plantas de interior alejadas de la excesiva calefacción en épocas invernales.
Riega tus plantas, pero ten cuidado de no ahogarlas. Riego medio: 2 ó 3 veces por semana.
Si la tierra de la maceta de tus plantas de interior está muy seca, aflójala con un tenedor y sumérgela en un barreño con agua o en el fregadero. La inmersión debe durar hasta que dejen de formarse burbujas. Escurre el agua sobrante y pulveriza las hojas.
Cuando la tierra de las macetas está muy apelmazada, lo mejor es coger un tenedor y remover la tierra. Con esta operación facilitarás la penetración del agua de riego y las plantas se desarrollarán mejor.
Si su aspecto es pobre, puede que necesite trasplantarla a otra maceta más grande o cambiarle parte de la tierra por otra más rica.
Tomado de infojardin.com